¿Puede una prohibición fomentar la innovación?
¿Servirá esta Ley como revulsivo para que un sector mayoritariamente “poco innovador” como la hostelería potencie nuevas iniciativas o nuevos modelos de negocio?
PROHIBIDO FUMAR 2011 la película
Siendo uno de los sectores punteros en la economía española, en mi opinión, la hostelería no se ha caracterizado por un factor innovador. Por supuesto hay excepciones, por ejemplo el caso de Abastos 2.0. que se han reinventado para sobrevivir.Tienen un perfil en Facebook, una cuenta de twitter y un blog, mediante los que se informa de la oferta diaria y de los proyectos de este establecimiento.
¿Hasta que punto los hosteleros agudizarán el ingenio debido a la prohibición de fumar en esos locales y crearán modelos que, siempre dentro de la legalidad, permitan ofrecer a sus clientes/asociados/miembros la posibilidad de fumar en su establecimiento?
¿Servirá la prohibición que marca esta nueva Ley como detonante para que veamos nacer otro conceptos de negocios distintos a este tan manido modelo tradicional?
Esta ley antitabaco ha hecho sin duda en este cortísimo plazo, recuperar las terrazas para el invierno y agotar las estufas setas. Se convierten las terrazas en el nuevo ‘salvoconducto’ para los fumadores. Los vendedores de este tipo de calefactores, han hecho su agosto. Según EL MUNDO, hay hasta lista de espera para lograr una estufa seta con precios entre 200 y 250 euros.
http://www.pymesyautonomos.com/
http://www.elmundo.es
Muy buen post. Estoy absolutamente convencido, que cuando "el tigre ruge no hay burro con reumatismo". La ley anti-tabaco es un detonanate para agudizar el ingenio y la creatividad. Conozco un par de restaurantes que ya había ideado la alternativa de la terraza, y justo el día 2 de enero, ya te ofrecían sus servicios en el exterior, bajo el calor de las famosas setas ó de sistemas de calefacción alternativos.
Saludos.
Los cambios normativos, de toda la vida, han generado necesidad de cambios en las empresas. Estos cambios podrán ser o no "innovación".
En el caso de los hosteleros, optimizar sus recursos para adaptarse a esta ley, sin perder "competitividad" desde luego genera un esfuerzo considerable, pero no creo que generen "innovación" alguna, al menos de la que resulte una evidente mejora o rentabilidad para la empresa.
Como si no tuvieran ya suficientes retos diarios como para ir metiendo nuevos.
La ley induce a un esfuerzo muy poco provechoso. Quizás si nos la hubiéramos ahorrado podríamos haber dedicado estos esfuerzos a proyectos realmente innovadores en materia de turismo y hostelería.
Haberlos, haylos.